El Power Electronics Valencia dio ayer la cara en la caldera turca, en la que ante todo un Fenerbahçe dirigido por Neven Spahija tuvo incluso ´bola de partido´ para ganar, pero donde apareció la mano salvadora del local Preldzic para taponar dos triples de Rafa Martínez que impidió saber qué hubiera pasado con ese balón en el aire, si hubiera entrado o no. Nunca se sabrá. El caso es que el equipo de Pesic perdió con la cabeza muy alta en la segunda jornada del Top16, en el que ya le espera el Olympiacos la semana próxima.
Ni las 15.000 almas del Sinan Erdem Arena, ni la puesta de escena al más puro estilo NBA, ni los primeros seis puntos del partido con dos triples en un minuto de Omer Onan y Marko Tomas metieron el miedo en el cuerpo a los jugadores taronja en el infierno turco. El carácter de los de Pesic salió a relucir bien pronto, con Claver y Javtokas anotando los cinco primeros tantos (6-5, min. 2). El Fenerbahçe llevaría la batuta en el primer cuarto y con un enrachado Onan lograrían mantener a raya a los valencianos (12-7, min. 4; 15-11, min. 7), que poco a poco ajustarían su defensa para finalizar los 10 primeros minutos con el 21-20. El equipo turco aceleraría el ritmo y el Power seguía dando la cara (24-24, min. 12). Un parcial de 7-0 para los locales fue el primer momento de agobio para el cuadro taronja, que lo resolvería con creces merced a la calidad de Claver, Rafa, Savanovic y Javtokas, que con sus puntos no dejaron que el Ulker se marchara en el electrónico (37-33, min. 20).
Al igual que en el primer cuarto los otomanos salieron ´rabiosos´ en el inicio del tercer periodo y si Marko Tomas había estado desaparecido por problemas de faltas, el croata tiró de los suyos con dos triples (43-33, min. 21). La respuesta del Power también llegó desde la línea de 6,75 m. —con Savanovic—, pero Tomas con un tiro libre seguía sumando (44-36, min. 22). En esta ocasión el equipo de Pesic tampoco se amedrentó y pese a otro triple de Tomas, los taronja consiguieron un parcial a favor de 2-9 (47-45) antes del tiempo muerto de Spahija, que no frenó la euforia visitante, ya que Lishchuk empató el duelo a 47. Entre Onan y Jasikevicius, con cuatro puntos, devolverían la ventaja a los locales (52-47, min 28), que el Power redujo antes del último cuarto (54-52, min. 30).
Con los nervios a flor de piel los de Spahija intentaron distanciarse nuevamente (61-56, min. 32) pero el Power no estaba por la labor y por segunda vez en el noche se puso por delante tras una canasta de Savanovic (62-63, min. 34). Tras esa reacción visitante el Fenerbahçe hizo su enésimo ´tirón´ para tratar de quitarse de encima a los valencianos y con la permisividad de los árbitros lograron situarse diez arriba (75-66, min. 37). Pero el espíritu de este Power roza lo sobrehumano. Punto a punto, canasta a canasta, defensa a defensa, los de Pesic remontaron hasta el 75-73 a un minuto del final. El Power necesitó de dos buenas defensas más para tener la opción de empatar o incluso de ganar el duelo. Sin posibilidad de pedir tiempo muerto, y a nueve segundos, Cook subió el balón, pero sin saber qué hacer con él le pasó la patata caliente a Rafa Martínez, esquinado en una banda a tres segundos de la bocina, tiempo suficiente para que el catalán ´armara´ el brazo para lanzar dos triples, lástima que esos dos intentos los taponara —sin falta— el ala-pívot, de 2,06 m., Preldzic.
Ni las 15.000 almas del Sinan Erdem Arena, ni la puesta de escena al más puro estilo NBA, ni los primeros seis puntos del partido con dos triples en un minuto de Omer Onan y Marko Tomas metieron el miedo en el cuerpo a los jugadores taronja en el infierno turco. El carácter de los de Pesic salió a relucir bien pronto, con Claver y Javtokas anotando los cinco primeros tantos (6-5, min. 2). El Fenerbahçe llevaría la batuta en el primer cuarto y con un enrachado Onan lograrían mantener a raya a los valencianos (12-7, min. 4; 15-11, min. 7), que poco a poco ajustarían su defensa para finalizar los 10 primeros minutos con el 21-20. El equipo turco aceleraría el ritmo y el Power seguía dando la cara (24-24, min. 12). Un parcial de 7-0 para los locales fue el primer momento de agobio para el cuadro taronja, que lo resolvería con creces merced a la calidad de Claver, Rafa, Savanovic y Javtokas, que con sus puntos no dejaron que el Ulker se marchara en el electrónico (37-33, min. 20).
Al igual que en el primer cuarto los otomanos salieron ´rabiosos´ en el inicio del tercer periodo y si Marko Tomas había estado desaparecido por problemas de faltas, el croata tiró de los suyos con dos triples (43-33, min. 21). La respuesta del Power también llegó desde la línea de 6,75 m. —con Savanovic—, pero Tomas con un tiro libre seguía sumando (44-36, min. 22). En esta ocasión el equipo de Pesic tampoco se amedrentó y pese a otro triple de Tomas, los taronja consiguieron un parcial a favor de 2-9 (47-45) antes del tiempo muerto de Spahija, que no frenó la euforia visitante, ya que Lishchuk empató el duelo a 47. Entre Onan y Jasikevicius, con cuatro puntos, devolverían la ventaja a los locales (52-47, min 28), que el Power redujo antes del último cuarto (54-52, min. 30).
Con los nervios a flor de piel los de Spahija intentaron distanciarse nuevamente (61-56, min. 32) pero el Power no estaba por la labor y por segunda vez en el noche se puso por delante tras una canasta de Savanovic (62-63, min. 34). Tras esa reacción visitante el Fenerbahçe hizo su enésimo ´tirón´ para tratar de quitarse de encima a los valencianos y con la permisividad de los árbitros lograron situarse diez arriba (75-66, min. 37). Pero el espíritu de este Power roza lo sobrehumano. Punto a punto, canasta a canasta, defensa a defensa, los de Pesic remontaron hasta el 75-73 a un minuto del final. El Power necesitó de dos buenas defensas más para tener la opción de empatar o incluso de ganar el duelo. Sin posibilidad de pedir tiempo muerto, y a nueve segundos, Cook subió el balón, pero sin saber qué hacer con él le pasó la patata caliente a Rafa Martínez, esquinado en una banda a tres segundos de la bocina, tiempo suficiente para que el catalán ´armara´ el brazo para lanzar dos triples, lástima que esos dos intentos los taponara —sin falta— el ala-pívot, de 2,06 m., Preldzic.
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